Estados Unidos, Canadá y México comparten un problema en común: las plagas invasoras de las plantas no respetan las fronteras internacionales de Norteamérica. Una plaga en un país puede presentar una amenaza en los tres países —salvo si las tres naciones trabajan conjuntamente. De tal forma que ellas han unido sus recursos científicos, técnicos y financieros para prevenir la introducción y dispersión de plagas de plantas en toda la región de Norteamérica. En 1976, ellos crearon la Organización Norteamericana de Protección a las Plantas (NAPPO).

Su meta es promover y asegurar la colaboración con el fin de proteger la sanidad vegetal en Norteamérica

Este artículo pone de relieve a la NAPPO como parte de nuestra celebración del 2020 como el Año Internacional de la Sanidad Vegetal. La meta de esta oportunidad única es crear conciencia acerca de la importancia fundamental de las plantas, un recurso valiosísimo para todo el género humano.

Tres niveles de protección fitosanitaria: nacional > regional > mundial

Nacional

Antes de ver el ámbito regional, necesitamos entender qué está sucediendo en el ámbito nacional. Cada país cuenta con una Organización Nacional de Protección Fitosanitaria (ONPF). La ONPF representa los intereses de su país en la arena internacional de sanidad vegetal (fitosanitaria). A las ONPF les competen los reglamentos de importación y la certificación de exportaciones en sus países en cuanto a las plantas, los productos vegetales y otros artículos que pudieran introducirse y dispersar plagas de plantas. Las ONPF también llevan a cabo programas nacionales para prevenir la dispersión adicional de plagas de plantas invasoras que hayan entrado al país.

Las ONPF de Norteamérica son:

Estados Unidos: el programa de la Oficina de Sanidad Vegetal y Cuarentena (PPQ, por su sigla en inglés) del Servicio de Inspección de Sanidad Agropecuaria del Departamento de Agricultura de EE. UU.
Canadá: la Agencia Canadiense de Inspección Alimentaria (ACIA)
México: la Dirección General de Sanidad Vegetal (DGSV) del Servicio Nacional de Sanidad Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER)

Regional

Cuando los países en una región unen fuerzas para proteger la sanidad vegetal, sus ONPF forman una organización regional de protección fitosanitaria (ORPF). Algunas ORPF elaboran normas de sanidad vegetal que protegen a toda su región contra las amenazas de las plagas de las plantas y facilitan el comercio seguro. Estados Unidos, Canadá y México crearon la NAPPO, que es la ORPF de Norteamérica. La NAPPO en realidad sobresale debido a que es la única ORPF en el mundo que también incluye a los representantes de la industria regional.

La NAPPO funciona como un foro exclusivo para el diálogo, las comunicaciones tempranas sobre asuntos de plagas emergentes de las plantas y la solución de problemas para beneficio de las autoridades de sanidad vegetal de los tres países. La organización muestra el valor crucial de las instituciones multilaterales en una región interrelacionada y orientada al comercio y al mundo.

A través de la NAPPO, los tres países de Norteamérica elaboran normas regionales y enfoques similares y constantes o «armonizados» para manejar las amenazas de las plagas.

Este trabajo fundamental facilita la movilización segura de plantas y productos vegetales hacia la región de la NAPPO y dentro de ella. De hecho, en el capítulo del nuevo tratado sanitario y fitosanitario (MSF) entre Estados Unidos-México-Canadá (AEUMC), la NAPPO continúa siendo reconocida como el órgano regional de establecimiento de normas de sanidad vegetal y de referencia para Norteamérica, lo cual fue el mismo caso que para el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte.

En el transcurso de los años, la NAPPO ha elaborado diversas normas regionales fundamentadas en la ciencia que apoyan el comercio eficaz a la vez que protegen a la región contra la introducción y dispersión de posibles plagas dañinas. Estas normas han ayudado a brindar información y determinar asuntos importantes de las normas mundiales de sanidad vegetal relacionadas con análisis de riesgo de plagas, áreas libres de plagas, embalaje de madera e irradiación como tratamiento fitosanitario, entre otros.

En el trabajo de la NAPPO participan los funcionarios gubernamentales regionales, los funcionarios normativos de sanidad vegetal, los científicos y representantes de la industria tanto dentro como fuera de la región de la NAPPO. La NAPPO se compromete a establecer relaciones esenciales según las metas comunes de protección a las plantas. Estas relaciones son cruciales para abordar de manera eficaz las plagas que amenazan la agricultura, horticultura, silvicultura y otros recursos naturales de Norteamérica. También son necesarias si nos damos cuenta de nuestra visión compartida de un sistema comercial seguro, justo y previsible en el ámbito regional y mundial.

Además, la NAPPO exhorta las conversaciones fitosanitarias que incluyan a todo el hemisferio occidental con el fin de identificar y apoyar los intereses comunes y resolver las diferencias. La NAPPO participa de manera activa en el Grupo Interamericano de Coordinación en Sanidad Vegetal, el cual también incluye a las otras cuatro ORPF del hemisferio.

Mundial

La protección de las plantas en el ámbito internacional es posible gracias a la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) de la Organización de las Naciones Unidas. La CIPF es un tratado multilateral con 184 partes contratantes. Su meta es proteger los recursos vegetales del mundo contra la introducción y dispersión de plagas y promover el comercio seguro.

Las normas fitosanitarias de la CIPF se fundamentan en los mejores datos científicos que estén disponibles. Ellas brindan al mundo las herramientas fundamentales para negociar los requisitos del comercio internacional con bases técnicas. Estas normas ofrecen un enfoque constante que las ONPF deberían seguir cuando reglamentan las importaciones y garantizan las exportaciones seguras para prevenir la introducción y dispersión de plagas de plantas en el comercio internacional. Una vez que se adopten en el ámbito internacional, las normas de la CIPF se convierten en el punto de referencia jurídico y la fuente de orientación reconocida en el ámbito mundial para el comercio de productos vegetales conforme al Acuerdo sobre la Aplicación de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias (Acuerdo MSM) de la Organización Mundial del Comercio.

Las ORPF como la NAPPO ayudan a sus países miembros a cumplir con los objetivos de la CIPF tales como las notificaciones de plagas, la diseminación de la información y el apoyo de las actividades para elaborar e implementar normas internacionales sobre medidas fitosanitarias.

La CIPF reconoce a las ORPF, las cuales incluyen a la NAPPO y otras nueve:

Conozca cómo la NAPPO protege la sanidad vegetal en el ámbito regional

Para el Año Internacional de la Sanidad Vegetal, la NAPPO exhibirá varias de sus iniciativas continuas de protección a las plantas. Manténganse en sintonía para ver otros artículos.